Los Chakras, conoce tu energía interior

Los Chakras los podemos definir como zonas de energía que corren horizontal y verticalmente a través de todo nuestro cuerpo. Cuando se encuentran crean poderosos centros de energía, los «chakras», cuyo nombre viene del sánscrito y significa «ruedas». Estos centros energéticos en forma de remolinos y a veces de color, son invisibles para el ojo pero sí existen y son reales. Conoce tu energía interior para mantener una mente y cuerpo sano.

La vibración de energía de los chakras produce una fuerza en el cuerpo humano que los hindúes llaman «tattva». En un organismo sano sobresalen del cuerpo hasta crear un puente entre la energía cósmica y la naturaleza física del ser humano. Absorven la energía exterior y la transmiten al cuerpo. Cuando se trata de una persona débil, enferma o anciana apenas alcanzan la superficie del cuerpo.

COMO FUNCIONAN EN NUESTRO INTERIOR

En un cuerpo joven y sano estos remolinos giran armoniosamente, con regularidad y gran velocidad. Así la energía vital llamada «prana» fluye libremente en todas las direcciones. Si una o más de estas ruedas comienzan a girar más despacio, se bloquea o impide el flujo de energía y perdemos el contacto con nuestra fuente de fuerza vital. Es lo que pasa cuando envejecemos o nos ponemos enfermos.

Para sentirnos fuertes, sanos y felices, todos los chakras deben de girar de forma regular y rápida. A través de diversas prácticas espirituales como la meditación, el yoga, el reiki y el tantra podemos conseguir que los chakras giren con regularidad. También en las terapias curativas como el Ayurveda y la medicina tradicional china, la estimulación de los chakras es muy importante.

LOS SIETE CHAKRAS

Encontramos siete chakras principales que se reparten por toda la columna vertebral. Cada uno de estos siete «remolinos» tiene una conexión específica con una de las siete glándulas del sistema endocrino humano, que es donde se producen las hormonas. 

La función principal de estos remolinos de energía es estimular el reparto de hormonas, ya que son ellas las que regulan todas las funciones corporales.

Los siete chakras principales

– CHAKRA RAÍZ. Se encuentra en la columna lumbar y está conectada con las cápsulas suprarrenales. Se asocia con nuestra confianza básica, ya que irradia hacia abajo y simboliza la supervivencia, el instinto de autoconservación, la seguridad y el contacto con la energía de la tierra. Regula todo lo sólido del cuerpo como los huesos, los dientes y las uñas. Si gira con normalidad su color es rojo rubí.

– CHAKRA SACRO. Está a la altura del sacro en la columna vertebral y actúa sobre las glándulas sexuales y reproductivas. Emite el color naranja y su misión es aumentar y mejorar nuestras ganas de vivir, la relaciones y la energía y la confianza propia. Además, regua el equilibrio de líquidos del cuerpo humano.

– CHAKRA DEL PLEXO SOLAR. Se encuentra en la columna vertebral a nivel del plexo solar. Actúa en el páncreas y fortalece la fuerza de voluntad. Nos da confianza y armoniza nuestro sistema nervioso. En su estado ideal su color es amarillo brillante. Regula todo lo relacionado con la digestión y los órganos digestivos.

– CHAKRA DEL CORAZÓN. Se encuentra a la altura del externón y está conectado con la glándula del timo en la región del corazón. Se ocupa de la salud, la bondad, la compasión y la armonía. A través de este chakra experimentamos levedad, ligereza y agilidad. Regula la circulación sanguínea, los pulmones, los bronquios, los brazos y las manos. Su color es el verde de las praderas.

– CHAKRA DE LA GARGANTA. Su color es el azul celeste y se encuentra cerca de la garganta. Este chakra nos conecta con nuestra fuerza mental y la eternidad. Nos proporciona vibraciones pacíficas, inspiración y verdad. Nos ayuda a reconocer el elemento etéreo dentro de nosotros. Regula la respiración, la voz, el metabolismo y el sistema nervioso.

– CHAKRA DE LA FRENTE. También llamado el «tercer ojo». Está conectado con la hipófisis o glándula pituitaria. Es incoloro y despierta las capacidades mentales, tal como la imaginación, la sabiduría, el auto-conocimiento y la fuerza de voluntad. Nos puede proporcionar percepciones estrasensoriales e incluso capacitarnos para la telepatía.

– CHAKRA DE LA CORONA. Se encuentra en la parte superior de la cabeza, que corresponde a la posición de la glándula pineal. Al contrario que el chakra de la raíz, se abre hacia arriba uniéndolos así con nuestra naturaleza espiritual. Es responsable de nuestro espiritualismo, de nuestra religiosidad e iluminación. Además, regula el ritmo vigilia-sueño y el sueño REM.